GS1 Internacional

Todas las reglas GS1 se basan en el principio de no ambigüedad que establece que cada variación de un mismo artículo debe contar con un código único que lo identifique, siempre y cuando la variación sea obvia para cualquier parte interesada en la cadena de suministro, principalmente el consumidor. 

El uso de los estándares de identificación GS1 es crítico para una operativa correcta y sin errores en los intercambios de información entre empresas, permitiendo identificar rápidamente y de manera inequívoca cualquier producto.

En la cadena de abastecimiento, la comunicación fluida entre todos los actores es fundamental para que el producto llegue en tiempo y en la forma adecuada al cliente final.

Gracias al uso de códigos de barras e información estandarizada, la identificación de productos y su posterior distribución se realiza de forma inequívoca, segura y rápida. Mediante el uso de estos estándares también es posible detallar los movimientos de la mercancía y conocer su ubicación y estado en todo momento. 

Cada producto tiene su propia identificación única asociada para que sea fácil de localizar en cualquier momento en la cadena de suministro. Conocer el estado de la mercancía desde su envío, durante el transporte y hasta su entrega es una información valiosa que favorece la atención al cliente.

El uso de estándares GS1 también avanza en el sector de la Sanidad, ya que ayudan a incrementar la seguridad de los pacientes y a obtener una mayor trazabilidad que va desde el fabricante de productos sanitarios hasta el paciente final.

La implementación de estos estándares se produce en todas las etapas de la cadena de aprovisionamiento, desde los fabricantes, mayoristas, hospitales, farmacias, operadores logísticos, entidades públicas y hasta el paciente.